Dentro de los videojuegos está el mundo donde tú puedes ser lo que quieras…
Brett Belsky, un profesor de educación física en una escuela pública de Brooklyn Nueva York es aficionado de Fortnite.
A este joven mentor se le ocurrió la gran idea de comenzar a jugar Battle Royale con sus alumnos para motivarles a mejorar su desempeño escolar.
Belsky les prometió a los pequeños que si podían superarse en determinado tiempo, el jugaría Battle Royale con ellos.
Es una gran idea ¿no?
Los estudiantes de Belsky aceptaron el reto y mejoraron sus calificaciones, por lo que su profesor cumplió la promesa de jugar con ellos. La última condición para que el profesor pudiera cumplir con su parte del trato era que los niños pidieran autorización a sus padres. Desafortunadamente uno de los chicos pasó por alto este detalle por lo que sus papás fueron a reclamar a la escuela ya que no estaba de acuerdo.
El padre del chico acusó al profesor de acoso y abuso así que la escuela despidió a Belsky por entablar contacto virtual con sus alumnos, ya que esto está prohibido.
Por el momento el caso está en manos del Departamento de Educación de Estados Unidos ya que el profesor, alumnos y padres de familia consideran que a pesar de haber cometido una falta, el acusado no merecía ser despedido.